Muse: el modelo generativo de inteligencia artificial de Microsoft para videojuegos

Microsoft crea Muse inteligencia artificial

Muse es el primer World and Human Action Model (WHAM) de Microsoft, es un modelo generativo de inteligencia artificial diseñado para crear gráficos de videojuegos, acciones del mando o ambos a partir de un breve prompt inicial, las expectativas sobre sus aplicaciones en el sector son altas.

 

Medios internacionales sugieren que Muse, fruto del trabajo conjunto de los equipos de Microsoft Research Game Intelligence y Teachable AI Experiences en colaboración con Ninja Theory de Xbox Games Studios, promete transformar la forma en la que se diseñan y experimentan por parte del jugador los videojuegos. 

 

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Entonces, ¿cómo funciona? Explicaron que se basa en el modo world model, en el que el modelo predice la evolución del juego a partir de una secuencia inicial de apenas un segundo de jugabilidad humana, es decir, 10 fotogramas. Luego Muse genera tanto los gráficos como las correspondientes acciones del mando que siguen la lógica interna del videojuego.

 

Microsoft logró mejorar la capacidad de su modelo de inteligencia artificial (IA) para procesar grandes cantidades de datos rápidamente usando unidades de procesamiento (GPUs) para entrenarlo, comenzando con una tecnología más antigua (las V100) y luego avanzando a una más potente (las H100).

 

Para entrenar a Muse, utilizan datos reales de jugabilidad. De acuerdo con La Vanguardia, se ha empleado más de 1000 millones de imágenes y acciones de mando extraídas de siete años de juego continuo en Bleeding Edge, el videojuego multijugador de Ninja Theory lanzado en 2020. Usando esa cantidad de datos, lograron que Muse aprenda la dinámica y la estructura del mundo virtual. 

 

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Indican que, para medir la calidad de Muse, tres fueron las métricas principales evaluadas: consistencia, diversidad y persistencia, así miden la capacidad del modelo para mantener una secuencia de juego que respete la dinámica y las reglas del entorno virtual; la variedad de secuencias posibles a partir de un mismo prompt inicial, y la habilidad del modelo para incorporar cambios introducidos por el usuario sin perder la coherencia global, según explica Microsoft.

 

Además, el impacto de Muse va más allá del diseño de videojuegos, por ejemplo, Peter Lee, presidente de Microsoft Research, destacó en su blog la similitud entre el aprendizaje del lenguaje que se observa en modelos como ChatGPT y la capacidad de Muse para comprender y reproducir la mecánica de las interacciones en entornos 3D.

 

Microsoft planea abrir el acceso a los parámetros de Muse y WHAM Demonstrator para los usuarios finales a través de Copilot Labs. Además, señala que los desarrolladores podrán utilizar esta IA para optimizar sus flujos de trabajo.

 

(Con información de La Vanguardia)

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